Te amamos Madre Tierra. Eres hermosa. Eres Luz y eres entrega total. Eres ejemplo estelar y eres azul agua. Aprendimos en esta Caravana que el Azul es en la Tierra Mapuche un color mayúsculo. La estrella de ocho puntas nos guía hacia el amor.

Anduvimos caravaneando por el Sur de América. Quizás no pudimos registrar en palabras la multitud de vivencias, pero estamos readecuándonos para mantener la Caravana en Tierra unida por proyectos como un documental, una web, una casa Nodo, algunos viajes y próximos eventos y talleres. Preparamos desde ya el próximo viaje.

Fuimos a la Patagonia, volvimos y descubrimos que todo sigue intacto. El amor crece e inunda el mar de posibilidades. Nos reconocemos familia, entre los peregrinos y con las hermosas personas que encontramos en el camino.
La devoción se hizo corazón. La ruta se hizo regalo. La tribu se hizo familia íntima.

En la foto de arriba nos encontramos en Shangri-La. Fue un día que nos dimos para conocer las cercanías de Las Trancas (Chillán) y nos guió Chopo. Alojamos en Onai, un hostal impresionante y recomendamos conocer el lugar.

Saludamos a todos los corazones del Universo. Expresamos nuestras ganas con perseverar en este rezo por la paz y la restauración del equilibrio en nuestra relación con Pachamama. Descubrimos que el estilo de vida apoya a las grandes verdades y por eso resulta clave la voluntad de cambiar los hábitos y de volverlos saludables.

Saludamos a la vida. Somos Uno con Todo, con nuestra amada Madre Tierra, con nuestros hermanos, con nuestros pensamientos y con todos los seres de todos los reinos. Somos sueño, poesía, realidad y aún más que todo eso junto. Somos ilimitados y habitamos en este presente eterno. Somos amantes de la felicidad. Somos humildes ante tanta maravilla y vamos por la gloria de la Creación.

Paz. Amor. Armonía y Realización.